Mérida, Yucatán; 30 de abril de 2020.- Especialistas en salud y epidemiología, integrantes del Comité de Asesoramiento, afirmaron que la implementación de la Ley Seca en Yucatán ha sido una medida necesaria y muy oportuna para garantizar el bienestar de las familias yucatecas y evitar el incremento de contagios causados por la falta del cumplimiento de las disposiciones sanitarias y de distanciamiento social.

El director de la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad Marista de Mérida, Luis Alberto Méndez Trujeque, afirmó que esta medida dispuesta por el Gobierno del Estado debe ser considerada como lo que es, algo transitorio, que tiene como objetivo favorecer la salud física, emocional y mental de los yucatecos durante la actual emergencia sanitaria.

“Hoy, hay que ocuparnos en lo esencial en nuestros hogares, que es nuestro bienestar. El hecho de permanecer en casa, este cambio de vida repentino por el confinamiento y la pandemia, tiene que verse como algo que es para evitar los contagios”, añadió.

Méndez Trujeque puntualizó que lo que se vive en estos días son momentos muy difíciles para la gente, pues la parálisis de las actividades no esenciales, ha repercutido en una crisis económica en muchos hogares, por lo que la prohibición del consumo de bebidas alcohólicas, evita el riesgo de que los recursos de los yucatecos sean destinados para ello y, por el contrario, sirvan para conservar la alimentación y bienestar de las personas.

Además, el experto en salud añadió que también se contribuye a disminuir la incidencia de situaciones de violencia en los hogares, pues está demostrado que el consumo de este tipo de productos favorece las agresiones en los ámbitos social y familiar. “Es una manera también de proteger a las mujeres, a los niños y adultos mayores de esta clase de situaciones”.

“La promoción de ley seca evita que se dé la socialización, que es lo que se está evitando ahorita, ya que no es tan común que la gente beba sola, sino que busca reunirse con una o más personas, lo que puede comprometer la demanda de los servicios de salud”, agregó.

En ese sentido, Méndez Trujeque destacó el liderazgo que ha demostrado el gobernador Mauricio Vila Dosal para implementar las medidas necesarias, como lo es la Ley Seca, para hacer frente a esta contingencia, a la vez que señaló la importancia de la responsabilidad y colaboración de la población para mitigar los contagios.

Por su parte, el infectólogo pediatra, Adolfo Palma Chan, señaló que la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas en el territorio estatal es una medida que está funcionando, ya que está mejorando la convivencia familiar, al tiempo que está contribuyendo a la baja del número de denuncias de violencia intradomiciliaria, lo que ha sido reportado incluso por autoridades municipales en el interior del estado.

“Además, no es algo esencial, como lo son el alimento o el vestido, para proteger a la población. Es una medida para asegurar el distanciamiento y disminuir la incidencia de los casos positivos, lo que es necesario para aplanar la curva que está teniendo la pandemia en el estado y el país”, indicó.

El especialista explicó que la Ley Seca no es algo exclusivo, pues muchos Gobiernos y ayuntamientos en el país la han empleado como una medida para el distanciamiento social. “El hecho de beber puede llevar a que la gente se reúna sin cuidar su distancia, además de que, algunas veces, concluye en situaciones de violencia”.

De igual manera, Palma Chan añadió que, además de situaciones de violencia, el consumo de alcohol está asociado a la depresión, ansiedad, lo que podría derivar en casos de suicidio si las personas viven solas.